lunes, 14 de noviembre de 2016

Niña Traviesa.




Voy a contarles algo que me ocurrió cuando era pequeña, tendría cuatro o tal vez cinco años. Resulta que me escondí debajo de la cama, este hecho sucedió en la habitación de mi hermana Celeste y era de noche, cerca de las nueve. Mientras tanto Rosa, mi mamá, y familiares me buscaban.
Ese mismo día la gente de mi barrio había leído en el diario que había una señora secuestrando niños. Muchos de mis vecinos me empezaron a buscar. Uno de ellos decía: “ya tenemos que buscarla, no sabemos qué puede pasar si no aparece“.
Mi mamá conversaba con mi vecina Irma:
Ya me fije debajo de la cama. ¡Ay, esa pendeja! Por lo que me hace pasar…
―Ya va aparecer, quédate tranquila ―decía mi vecina consolándola.
―No me puedo quedar de brazos cruzados, voy a llamar a la policía.
Llamaron a la policía. Mi mamá le daba la explicación de cómo había sido. El policía trató de tranquilizarla a través del  teléfono y le repitió que vuelva a fijarse en toda la casa, para ver si no estaba escondida. Mientras tanto la consolaba:
―Tranquila, señora, ya vamos para allá. Tenga paciencia y la esperanza de que la vamos a encontrar a su hija.
Después de todo esto, mi mamá se fijó nuevamente en las habitaciones. Descubrió que yo estaba debajo de la cama comiendo unas galletas y, además, jugando con las pinturas de mi hermana Celeste. Con muchísimo alivio mi padre, Raúl, llamó a la policía para cancelar la denuncia.

Rosa Comisso 2D

No hay comentarios:

Publicar un comentario