Un día estábamos jugando en el río con mi
familia. Mis sobrinos Thomas y Santiago se tiraban al medio del río y se los
llevaba la corriente hasta un lugar donde se iban a la orilla. Al rato
decidieron probar ir un poco más lejos. Se tiraron y la corriente se los llevó
lejos. Pudimos ver que se agarraron de un árbol, mientras escuchábamos que
alguien se reía. Mi papá en eso les gritó:
― ¿Qué pasó?
Ellos le respondieron que los había llevado la corriente y
que no sabían cómo regresar. Asustados, nos pedían ayuda. Por eso mi hermano se
tiró para salvarlos, pero a él también lo llevo la corriente. Mi papá, Alberto,
también quiso ir a buscarlos y pudo nadar a la orilla, mi papá dijo:
― No se vayan más para allá.
Ellos les responden:
―Bueno.
Los salvaron y todos estábamos felices.
Oriana Gómez 2D
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