El
cactus.
Hace
muchos años, vivían aborígenes llamados calchaquíes ubicados en
Argentina, en la provincia de Tucumán. Uno de los tantos indios de
la tribu se llamaba Kambú. Él era apuesto, de cabellera corta, un
tanto musculoso y alto. Era el encargado de criar las llamas, junto a
su hermano de alma Takín. También estaba su hermosa esposa Amaru.
Un día,
Kambú salió a cazar con su arco y flecha. Por equivocación tiró
una flecha hacia el lado en que estaba su tribu y le pegó en el
pecho a su esposa. Fue poco lo que duró viva.
Él muy
angustiado para olvidar lo ocurrido se fue hacia el desierto.
Desolado, caminó y caminó sin ver un rumbo. Tras noches y días de
luto, sed y hambre, Takín junto a otros aborígenes salieron en
busca del joven pero no lo encontraron. Takín recorrió toda zona
posible del desierto.
Una
mañana, Takín dio un grito para avisar que había encontrado algo.
Era la manta de Kambú sobre un cactus. Había muerto seco de tanto
calor y sin haber tomado nada.
Florencia
Cabrera, 1° A
No hay comentarios:
Publicar un comentario